Día Mundial por la Reducción de las Emisiones de CO2

La igualdad de género debe estar más presente en la ciencia

Recientemente, se celebró el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que nos recuerda la relevancia femenina en ese ámbito.

Marie Curie es, probablemente, la científica más conocida de la historia, pero no es ni de lejos la única. Muchísimas otras han contribuido y siguen contribuyendo con sus valiosas aportaciones a la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM por sus siglas en inglés).

Pese a que estas áreas resultan esenciales para la economía, en la mayoría de países aún no se ha alcanzado la igualdad de género. La brecha empieza en la educación, debido a la falta de referentes, pero continúa en el campo de la investigación y en el mundo empresarial.

Como ha reconocido António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas, “las mujeres y las niñas siguen enfrentándose a barreras y prejuicios sistemáticos que les impiden seguir carreras científicas. Esto priva a nuestro mundo de grandes talentos”.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) incluyen desafíos vitales como la salud y el cambio climático. Abordarlos implica aprovechar todos los talentos disponibles en el área de las ciencias, tanto de hombres como de mujeres.

“Así lo entendemos en Litoclean”, como señala orgullosa Natàlia Blázquez-Pallí, responsable de ensayos y del laboratorio del Centro de Innovación de Litoclean de Rubí (Barcelona). En sus propias palabras, “en base al conocimiento científico y a nuestra experiencia, desarrollamos soluciones aplicadas. Nuestro equipo cuenta con mayoría absoluta de mujeres, todas ellas con formación técnica, pero procedentes de diferentes especialidades. Este factor diferencial nos da la capacidad de encontrar soluciones con una visión multidisciplinar”.

Las tareas del laboratorio no sólo consisten en llevar a cabo ensayos piloto para nuestros proyectos, sino en diseñar y desarrollar pruebas y nuevas tecnologías aplicadas a medida, según las necesidades que se presentan en el área de I+D y en el sector de la gestión de suelos y aguas. Estas actividades se realizan siguiendo el método científico, con protocolos y procedimientos (propios y externos) que garantizan la estandarización, la calidad y la confiabilidad de los resultados obtenidos, y prestando especial atención a la sostenibilidad y a la gestión de residuos del laboratorio.

Un futuro científico y tecnológico más diverso y equitativo es posible. Debemos seguir esforzándonos para conseguirlo.